jueves, 7 de diciembre de 2006

Nueva victoria de la miseria kirchnerista


NOTIVIDA, Año VI, nº 409, 6 de diciembre de 2006
Senado de la Nación
MEDIA SANCIÓN PARA LA LEY DE EDUCACIÓN NACIONAL
Por Mónica del Río
Por 57 votos a favor y 3 en contra (los de los senadores Liliana Negre, Delia Pinchetti y Ricardo Bussi) el Senado le dio hoy media sanción al proyecto de Ley Nacional de Educación. Se suprimió la votación en particular (de cada artículo) porque al término del debate general los kirchneristas anticiparon que no iban a aceptar ninguna modificación.
La norma establece un sistema educativo único en todo el territorio nacional, dispone la obligatoriedad de los niveles primario y secundario, modifica la carrera docente y los contenidos curriculares.
La iniciativa garantiza, entre otras cosas, impartir conocimientos para una “sexualidad responsable”; fomentar “condiciones de igualdad que respeten las diferencias entre las personas sin admitir discriminación de género ni de ningún otro tipo”; promover “la valoración de la multiculturalidad”; preservar y fortalecer las pautas culturales, lengua y cosmovisión de los pueblos indígenas y construir “la memoria colectiva sobre los procesos históricos y políticos que quebraron el orden constitucional”. Vale decir es una herramienta clave para destruir la identidad cultural, ideologizar la educación y adoctrinar con la visión marxista de la historia.
El Debate
Amanda Isidori (UCR, Río Negro), presidenta de la comisión de Educación, afirmó que el proyecto "es bueno porque contiene aspectos esenciales" y que "fija taxativamente la responsabilidad del Estado". Sostuvo que promueve la concientización de los derechos humanos y resaltó la creación del Instituto Nacional de Formación Docente.
Silvia Gallego (FPV, La Pampa), manifestó que será una ley con legitimidad porque surgió "de la necesidad que ha planteado la sociedad en su conjunto de generar una nueva ley y una estrategia de participación".
Gerardo Morales (UCR, Jujuy): pidió que se agregue en el art. 8 que “la educación de gestión estatal es laica”. Si bien falta reformar otras cosas, dijo el legislador, sería “la forma de ir marcando el camino de la separación entre Iglesia y Estado”.
Liliana Fellner (FpV, Jujuy): defendió el reconocimiento de la equidad de las culturas aborígenes. “La diversidad es una fortaleza y uno de los pilares del desarrollo sustentable. Es una muy buena ley, fortalece la identidad argentina y Latinoamericana”.
Delia Pinchetti de Sierra Morales (FR, Tucumán): autora de un dictamen en minoría, afirmó que el debate legislativo se transformó en un referéndum y que la consulta previa tiene “dudosa consistencia”. Nadie supo explicarme –aseguró la senadora- como lograron procesar tan rápido las respuestas recogidas. En Tucumán las escuelas debatieron los documentos de trabajo el 23 de octubre y el 16 de noviembre el Ejecutivo envió el proyecto. “Los padres de los colegios católicos de Tucumán cuestionaron el proceso”.
“Las diferencias que tenemos con este proyecto no son menores por eso presentamos un proyecto diferente”. Entre esas diferencias Pinchetti mencionó: la exclusión de la dimensión religiosa, que no se mencione en primer término a los padres como agentes naturales y primarios de la educación, y que no se respete la autonomía de las provincias.
Liliana Negre (Frente Justicialista, San Luis): autora de otro proyecto en minoría, mencionó a la educación como el motor del desarrollo integral de la persona que abarca dimensiones biológicas, estéticas, intelectuales, religiosas…. Señaló que los padres no tendrán posibilidad en la práctica de elegir la educación de sus hijos, entre otras cosas, porque los docentes no podrán capacitarse conforme a su cosmovisión.
Centró su oposición en cuatro objeciones al proyecto: desconoce los derechos de los padres, no atribuye al Estado el rol subsidiario que le compete, no administra los recursos económicos destinados a la educación en base a la justicia distributiva y excluye la dimensión religiosa.
Daniel Pérsico (FpV, San Luis): aseguró que la ley apunta a la cantidad -porque la secundaria será obligatoria- y a la calidad -por la capacitación docente-.
Hilda “Chiche” González de Duhalde (Frente Justicialista, BsAs): adelantó su voto positivo para un “proyecto impecable”.
Celso Jaque (FpV, Mendoza): destacó el valor “estratégico y político” de la ley y anticipó su voto positivo.
Ricardo Gómez Diez (PRS; Salta): afirmó que la suerte de esta ley dependerá de su implementación. Aseguró que la educación argentina ha ido perdiendo calidad, que no se premia el esfuerzo y que se confunde educación con asistencialismo.
Carlos Rossi (Frente Nuevo, Cba.): dijo que iba a votar favorablemente y subrayó el consenso alcanzado y el compromiso con la capacitación docente.
Vilma Ibarra (FpV, Cap. Fed.): respondió agresivamente el discurso de la senadora Pinchetti. “La senadora por Tucumán dudó del debate social de la ley, para conocer el proceso basta entrar en la web del Ministerio. Esta es una ley con debate social y parlamentario”. “La senadora por Tucumán es representante del genocida Bussi y tal vez le molestó que el art. 70º no permite que a nuestros hijos los eduquen genocidas y que el inc.c del art. 92º garantice la construcción de la memoria colectiva”.
“Estamos orgullosos del Estado laico y de la educación laica. No quiero financiar la educación privada”.
Cuando Ibarra acabó, Pinchetti le aclaró que como todo senador representa a una provincia no a una persona y que es docente por lo que “no balconea en el tema”. Le leyó además todos los recortes del diario La Gaceta que recogen las quejas de los distintos actores sociales por la falta de tiempo para el debate y le ofreció copia de los mismos.
Rubén Giustiniani (PS, Sta. Fe): dijo que “a la educación se la puede ver desde la ventana del mercado o desde la democracia” y aseguró que “esta ley retoma algunas ideas centrales: la educación como un derecho”. “La ley 1420 es la ley de la educación común, laica, gratuita y obligatoria, por eso duró 100 años”. “La anterior Ley Federal de Educación, no tuvo el respaldo del consenso”. “Volvemos a la educación popular y democrática”.
Ernesto Sanz (UCR, Mendoza): manifestó que estaban sancionando una ley de amplísimo consenso, trabajada a lo largo y a lo ancho del país, y que al lado de cada ley de educación hay un modelo de país que la ley recoge. “En esta ley reaparece el estado como constructor del desarrollo de las sociedades”. “El principal objetivo de esta ley es desarrollar ciudadanos, cualquiera sea su profesión y construir una sociedad democrática, pluralista y equitativa”. “Esta ley es un ejemplo de pluralidad y participación”, concluyó el jefe de la bancada radical.
Miguel Ángel Pichetto (FpV, Río Negro): “Lo importante de esta sesión es que el Senado asumió que la educación es una política de estado”. “Una ley tiene que estar inserta en una política, los productos de laboratorio no cambian la historia”.
“Kirchner tiene un rumbo y esta ley tiene antecedentes que son decisiones del Gobierno Nacional”. El jefe de la bancada oficialista remató enfatizando que “una ley tiene sentido cuando está inserta en un proyecto de país”. FIN

4 comentarios:

Muret dijo...

Los padres que pueden manadr a sus hijos a colegios católicos (no New Age, ni nada por el estilo) tiene al menos una última trinchera que les pemita transmitir a sus hijos su "cosmovisión" y su "cultura".
Pero ¿Y aquellos que no pueden?.
Veremos en no mucho tiempo una suerte de "Home Schooling" de cruenta implementación.
Triste y lamentable corolario de una administración antidemocrática y represiva.
Triste falta de opciones de parte de una oposición desorganizada. Triste silencio de la Jerarquía de la Iglesia nacional.

Benjamín Benavides dijo...

Completamente de acuerdo, Muret. Gracias por el nuevo comentario.
Saludos

osvaldo schiappacasse dijo...

por estos lados la ley no se trato como hacen creer. Tampoco se ven los colegios catolicos serios ya que la mayoria tiene puesta su preocupacion en no perder aportes. Y si eso no alcanza la ley se reserva la posibilidad de la declaracion de emergencia educativa para aquellas instituciones que se aparten de las pautas que da la ley, en especial las de genero etc.es muy grave y lo peor es que esta indiferencia que hempos demostrado frente a la ley se nos convertira en un gravisimo problema. Hay mucho para decir. atte

Benjamín Benavides dijo...

En un todo de acuerdo. La debilidad de la mayoría de las escuelas católicas es un arma terrible en manos del enemigo. Y esa debilidad, además del tema económico, es doctrinal y pastoral. En muchos casos, con el retroceso de las órdenes educadoras y la puesta en marcha a travès de laicos, se trata directamente de apostasía o falta de fe. Creo que el post de la escuela en Neuquén, que da educación sexual relativista, es suficientemente claro al respecto. Saludos cordiales. B.B.